Las calificaciones de riesgo o “ratings” son valoraciones que indican la capacidad de pago que posee un gobierno, institución pública, compañía o producto financiero, en lo relativo a sus obligaciones financieras a lo largo del tiempo. Este ecosistema incluye a las entidades de intermediación financiera (EIF), así como a cualquier emisor de valores.
Por tanto, estos códigos alfabéticos son una especie de “puntuación” que muestran qué tan confiables son las diferentes entidades o instrumentos financieros (letras del tesoro, bonos, acciones, fondos, etc.) en cuanto a pagar sus deudas a tiempo y de manera consistente.
Los ratings se expresan utilizando un sistema de combinaciones de letras, signos y, en ocasiones, números, dentro de una escala determinada que puede ir desde AAA (máxima solvencia o calidad crediticia alta) hasta D (probabilidad de impago elevado), dependiendo de la calificadora internacional que lleve el proceso.
Esta información sirve de referencia para los inversionistas y facilitadores de préstamos a la hora de tomar una decisión, ya que las calificaciones reflejan la solvencia financiera y el riesgo asociado a corto o largo plazo.
Agencias de calificación
Las agencias calificadoras de riesgo son empresas especializadas que analizan la capacidad de organizaciones y gobiernos para pagar sus deudas. Antes de otorgar una calificación, estas estudian el contexto económico, financiero y legal, entre otros indicadores, para determinar la solvencia y la probabilidad de impago de la entidad analizada.
Cabe destacar que la calificación emitida expresa la opinión de la agencia respecto al nivel relativo de riesgo crediticio.
En el mundo existen múltiples agencias de “ratings”, también conocidas como agencias de calificación crediticia. Dentro de las principales se encuentran las estadounidenses Moody’s, Standard & Poor’s (S&P) y Fitch Ratings.
Esta última es una de las tres empresas autorizadas para operar en la República Dominicana junto a Feller Rate y Pacific Credit Rating.
Escala de calificación de riesgo
Cada combinación representa un nivel de riesgo crediticio distinto de acuerdo a la nomenclatura de la agencia correspondiente. Esto quiere decir que puede haber ligeras diferencias entre una y otra.
Sin embargo, siguen un patrón similar de calificaciones, desde las más altas y seguras hasta las más bajas y riesgosas o de impago; lo que permite hacer una comparación.
La tabla a continuación muestra cómo se comparan las escalas de calificación de algunas de las principales agencias de calificación.
Cuanto más cerca esté la puntuación de la parte superior de la escala, mejor es la calificación crediticia y menor es el riesgo percibido, mientras que cuanto más cerca esté de la parte inferior, mayor es el riesgo.
Así, el rating AAA representa la máxima calidad crediticia y la menor probabilidad de impago a corto y largo plazo. Para una institución financiera, esta calificación podría significar que sus niveles de rentabilidad económica y financiera está en un buen nivel de apalancamiento. Mientras que la calificación BBB+ indica una calidad de crédito buena, pero con cierto grado de riesgo moderado.
En este contexto, es importante resaltar que el periódico El Caribe, en una publicación del 14 de abril del 2024, explicó el valor que tiene para el mercado de capitales y el país que tres bancos múltiples dominicanos hayan obtenido un rating AAA, la máxima calificación crediticia otorgada por las agencias. Estas calificaciones proyectan la robustez de las entidades y el sistema financiero de República Dominicana, a nivel nacional e internacional, abriendo las puertas a facilidades de préstamos e inversiones con un alto nivel de confianza.