En la República Dominicana, las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes) son un motor para la generación de empleo y el crecimiento económico. Este segmento de empresas aporta un 32% del valor agregado al Producto Interno Bruto (PIB) del país. De este porcentaje, las microempresas contribuyen con un 20%, mientras que las pequeñas y medianas con un 12%.
Asimismo, generan aproximadamente 3,052,449 empleos, lo que equivale al 61.6% del total en el país, según los resultados de la primera Encuesta Nacional de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas 2022-2023, conocida como Enmipymes, del Banco Central y el Ministerio de Industria, Comercio y Mipymes (MICM).
Una mipyme es toda unidad de explotación económica, realizada por persona natural o jurídica, en actividades empresariales, agropecuarias, industriales, comerciales o de servicio rural o urbano que, según el marco legal, responda a criterios de clasificación por tamaño. Estas son las normativas que explican cómo se determina.
404,034 | Cantidad de establecimientos mipymes en el país (Enmipymes, 2024)
Valor indexado. En materia económica y financiera, la indexación de valores es un procedimiento que se utiliza para conservar el valor de una cantidad de dinero.
Criterios de clasificación de las Mipymes
La Ley de Mipymes No. 488-08, modificada por la No. 187-17, es el documento legal que detalla los parámetros específicos para clasificar una empresa como micro, pequeña o mediana. Según su artículo 2, se utilizan dos criterios principales: volumen de ventas y personal empleado.
El Párrafo I explica que una empresa debe cumplir con ambos criterios de clasificación por tamaño para ser categorizada como mipyme. Y en caso de superar el margen de uno de los parámetros, debe ser clasificada en la categoría correspondiente a la variable superior.
¿Con qué frecuencia se ajusta el valor de las ventas brutas de las Mipymes?
El valor actualizado de las ventas brutas se indexa anualmente con base al Índice de Precios del Consumidor (IPC). De acuerdo con el párrafo II del art. 2 de la Ley No. 488-08 (2008), el MICM publicará al inicio de cada año los valores indexados de este criterio.
Para el diseño de políticas públicas específicas, esta ley establece una sub-clasificación dentro de la categoría de microempresa. Según el párrafo III, se dividen en “microempresas de subsistencia” y “microempresas de acumulación“, a partir de lo que establezca el MICM.
Sin embargo, a los efectos de la ley, no serán consideradas como mipymes aquellas que estén “asociadas, vinculadas o controladas por otra empresa, o por otras empresas, o por grupos económicos nacionales o extranjeros, que no cumplen con tales requerimientos”.
Responsabilidad de la clasificación
Por otra parte, la Ley No. 37-17 que reorganiza al MICM, modificada por la Ley No. 10-21, establece que ese Ministerio es la institución encargada de realizar la clasificación de las mipymes y de expedir las certificaciones pertinentes.
Es por eso que cada año se actualiza el valor máximo de ventas brutas anual mediante resolución de ese Ministerio, con base en el IPC determinado por el Banco Central de la República Dominicana. Es una disposición similar al ajuste que aplica la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) por inflación del valor máximo para la calificación de viviendas económicas.
A raíz de la resolución más reciente, los valores actuales son los siguientes:
Categorías mipyme | Trabajadores (máximo) | Ventas brutas anuales (máximo) |
Microempresa de Subsistencia | Hasta 2 | RD$828,698.11 |
Microempresa de acumulación | Hasta 10 | RD$11,049,690.00 |
Pequeña Empresa | De 11 a 50 | RD$74,585,407.57 |
Mediana Empresa | De 51 a 150 | RD$279,004,672.76 |
El desarrollo de las mipymes es importante para el crecimiento del país. Así lo demuestran las acciones conjuntas del sector público y empresarial, alineadas a la Estrategia Nacional de Desarrollo 2030, establecida por la Ley 1-12, que tiene como uno de sus objetivos “elevar la eficiencia, capacidad de inversión y productividad de las mipymes”.
En ese contexto, entidades de intermediación financiera (EIF), como los bancos múltiples, se convierten en aliados estratégicos al crear propuestas para mejorar su financiamiento a medida que aumenta la disponibilidad de información económica y financiera sobre estas empresas.