Crónicas de vida y banca

Rostros de la banca | Manuel González Martínez, director técnico de la ABA

El de Manuel González Martínez, quien lidera la Dirección Técnica en la Asociación de Bancos Múltiples de la República Dominicana (ABA), es un verdadero rostro de la banca. Lo es no solo por el peso específico de su función en el sistema financiero dominicano, sino, sobre todo, por una trayectoria de más de 40 años y una experiencia de 360 grados en el sector, que incluye la investigación y la formación de profesionales de este campo.

Economista y experto en finanzas, la carrera de González Martínez en el negocio bancario incluye roles directivos en varias entidades de intermediación financiera del país.

Este dominicano de origen español, con acento madrileño incluido, ya había tenido su primera experiencia en el organismo regulador del sistema, el Banco Central de la República Dominicana, donde comenzó, con diferentes funciones, a construir su perfil de experto en la banca.

Ya en la ABA, donde labora desde 2004, le ha correspondido encabezar estudios técnicos y dirigir los procesos de socialización con respecto a normativas y buenas prácticas atinentes a los servicios bancarios, representando al gremio en mesas de trabajo con entidades afines, así como con las autoridades reguladoras y supervisoras del sistema.

Una vivencia de especial recordación consistió en las sesiones desarrolladas para exponer los puntos de vista del sector durante el proceso de redacción de los reglamentos de aplicación de la Ley Monetaria y Financiera (183-02) y otras normas vinculadas con la actividad financiera.

“Indudablemente, fueron momentos de mucha discusión y debates, para llegar a los reglamentos que nos pusieran al nivel de las buenas prácticas internacionales, de las garantías debidas para los usuarios del sistema y de un ambiente propicio para la actividad bancaria”, nos cuenta.

Tan vastos conocimientos, forjados a fuerza de estudios académicos, trabajo, investigaciones y experiencias, los ha compartido en las aulas con varias generaciones de profesionales de la economía, las finanzas y otras áreas empresariales.

De esto y más, nos cuenta Don Manolo en esta entrevista.

¿En qué momento hizo de República Dominicana su nuevo hogar?

Yo llegué en agosto de 1980; es decir, que van ya 44 años que estoy en el país. Llegué jovencito y ya soy un nacional dominicano también.

Entonces no me veía como un hombre de la banca; en España yo iniciaba la ingeniería, pero llegué aquí y estudié economía, y me apasioné de la economía, y ya ahí sí me empecé a visualizar dentro de la banca.

¿Y cómo fue ese proceso de Manuel González al entrar al sistema financiero dominicano?

Bueno, cuando entré al sector financiero, me acababa de graduar en Economía Cum Laude en Intec, y entonces fui al Banco Central. Y tuve la suerte, en el Banco Central, de entrar al Departamento de Estudios Económicos. Pero no solo entrar al Departamento de Estudios Económicos, sino que pasé por todas sus divisiones: Fiscalidad, Balanza de Pagos, Agrícola, Monetaria y Financiera…

Inclusive, en la última etapa mía en el Departamento de Estudios Económicos, el director era el mismo gobernador actual, Héctor Valdez. Después de ahí pasé al Departamento Financiero, donde estuve laborando en el área de Encaje Legal, Adelanto y Redescuentos.

Y lo importante no solo es las áreas en las que trabajé, sino que participaba bastante en las investigaciones del organismo. De hecho, incluso en el año 84, fui representando a la reunión de técnicos de Bancos Centrales en Montevideo, Uruguay, con un trabajo de investigación que fue seleccionado y después fue publicado en la revista de Ciencia y Sociedad, sobre el papel de los instrumentos de política monetaria en la crisis de la economía dominicana del 78 al 83.

Posteriormente, me fui del Banco Central a lo que era el Banco Santander, convertido en el Banco Español. Ahí fui a trabajar en lo que tenía que ver el Departamento de Expansión y Creación de Empresas. Es decir, tenía que ver con todos los proyectos de inversión para la creación y expansión de las actividades empresariales.

Todos los proyectos, ya fueran agrícolas, industriales, ganaderos, tenía uno que evaluarlos y proponer su aprobación o su ampliación de financiación.

Posteriormente, también me moví a otros bancos y luego dejé la actividad bancaria y me fui para España a estudiar especialidades.

¿Cómo compara la banca actual con la de aquellos años?

En aquel momento, la banca era un grupo de bancos nacionales y extranjeros, pero la banca extranjera era la preponderante, era la mayor, en comparación y en posición dentro de la actividad financiera.

Era una banca muy orientada al crédito en aquel momento, una banca, podríamos decir, más elemental.

La banca actual es una banca muy técnica, donde hay que tener unas grandes competencias personales, financieras, tecnológicas, organizativas, relacionales, y donde ya el negocio no solo es crédito, sino desarrollo de portafolios de inversión, gestión de tesorería, la gestión de los riesgos, la diversidad de riesgos que hay, en un marco regulatorio muy complejo como el actual, que vino a evolucionar en los últimos 20 años, de la línea de lo que es el marco de Basilea I y II.

Entonces, tiene personal muy calificado, muy desarrollado, con conocimientos, capacidades y habilidades para estar trabajando en la actividad, ya sea en el área financiera, en el área de la tesorería, en el área de riesgos, en el área de prevención, en el área de la ciberseguridad.

Se ha ido fortaleciendo mucho y lo principal de la banca actualmente es su capacidad de gestionar las entidades y los riesgos, lo que ha llevado a unas entidades bien fortalecidas desde el punto de vista de una buena gestión de la liquidez, de gestión de los riesgos de cartera, con buenos niveles de provisiones, buen nivel de control de lo que tiene que ver la morosidad, sumamente reducida, con provisiones suficientes de cobertura amplias, con buenos niveles de capital, con indicadores de rentabilidad económica y financiera de los mejores que se puede tener a nivel de la región e inclusive a nivel de Europa.

Es decir, la banca de aquí tiene unos indicadores envidiables, por lo que realmente yo creo que eso es lo que le da una gran fortaleza y debe ser un punto seguro de observación de la banca internacional.

¿Qué tipo de trabajo hace la Dirección Técnica de la ABA?

La Dirección Técnica de la Asociación de Bancos es un área bastante importante; tenemos a cargo diferentes comités. Es decir, tenemos la coordinación de lo que es el Comité de Finanzas, Comité de Auditoría, Comité de Riesgos, Comité de Tesorería, el Comité de Operaciones y Sistema de Pagos, el de Seguridad Bancaria y el Comité de Tarjeta de Crédito.

¿Cuál es nuestra función? Bueno, sabemos que nosotros tenemos en el gremio 16 bancos. Ha habido momentos que ha habido alguno más o alguno menos.

Pero nuestra función es más bien de llevar a un punto de encuentro. Cada banco tiene su forma de ver la actividad, las regulaciones, las normas, las leyes, y en los procesos de reuniones de los comités, nosotros tratamos de que se pueda llegar a un punto de encuentro para poder presentar unas observaciones que realmente sean apoyadas por todos.

Nosotros tenemos la representación y somos los portavoces, para llevar y defender, desde el punto de vista técnico, las posiciones de todo el gremio en los procesos de discusión de leyes, reglamentos e instructivos, ante los supervisores, ya sea la Superintendencia de Banco, la Superintendencia del Mercado de Valores, el Banco Central, el Congreso, etc.

También estamos en el Comité de Riesgos de la Federación Latinoamericana de Bancos, donde ocupamos una posición en la Junta Directiva de ese comité. Y también estamos actualmente en el Club de Gestión de Riesgos en lo que tiene que ver los riesgos de contraparte y de crédito.

Cuéntenos su experiencia formando generaciones de profesionales

Bueno, yo tuve una primera experiencia, recién graduado, duré unos años en la PUCMM dando clases de economía. Pero mi principal docencia ha sido después de que llegué de hacer el MBA y el doctorado de España. En el año 2000, entré como profesor en INTEC, en la Pontificia PUCMM, en UTESA, y prácticamente daba clases todos los días.

Daba clases de finanzas corporativas, dirección estratégica, economía de la empresa, pero principalmente me concentré en lo que era la dirección estratégica, que es lo que desarrollé siempre en las clases de maestría por 20 años. Y desde el 2000 hasta el 2018 estuve dando docencia, principalmente en INTEC.

Inicialmente, inclusive, daba las diferentes maestrías que ellos tenían y después colaboré con ellos desarrollando lo que era el programa de educación continuada, el diplomado en gestión de riesgos bancarios, que se mantuvo por ocho años, hasta que me retiré.

Realmente, me gustaba mucho no solo enseñar, sino que tuviera un impacto en la mente de ellos y que esas personas, a partir de las clases mías, pudieran sentir una transformación mental y de gestión diferente a como ellos pensaban que era, viendo la actividad de las empresas desde una complejidad que tal vez antes no habían visto.

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